Raíces de Sabor

En el corazón fértil de Vegas del Guadiana, donde el sol acaricia los campos y el río alimenta una tierra generosa, nació hace décadas una tradición que hoy tiene sabor a futuro.

Nuestra cooperativa se fundó con un propósito claro: dar valor a lo que cultivamos, sin intermediarios y sin perder la esencia de nuestras raíces. agricultores que, generación tras generación, hemos cuidado del tomate como si fuera un tesoro. Lo sembramos, lo vemos crecer, lo recogemos en su punto exacto de maduración, y ahora también lo transformamos en algo que llega directo a tu mesa: salsa de tomate frito ALMA con sabor auténtico.

Pero no nos quedamos en la receta de siempre. Nos preguntamos: ¿y si llevamos nuestro tomate un paso más allá? Así nacieron nuestras salsas de tomate frito con sabores. Cada una cuenta una historia diferente, pero todas tienen algo en común: el tomate de nuestra tierra y el cariño de quienes lo cultivan.

Nuestros tomates no recorren miles de kilómetros antes de ser procesados. Van del campo al obrador en pocas horas, conservando todo su sabor, aroma y propiedades. No añadimos nada artificial. Solo lo necesario para que disfrutes de un producto sano, sabroso y auténtico.

Nuestra fábrica es una familia que cree en el trabajo bien hecho, en el producto local y en la sostenibilidad. Cuidamos del entorno que nos da la vida, apostamos por la economía circular y reinvertimos en nuestro pueblo, creando empleo y oportunidades.

Porque en cada bote de nuestra salsa no solo hay tomate, hay historia, hay campo, hay identidad, hay ALMA. Y queremos que, al probarla, tú también formes parte de esta historia.

Desde Vegas del Guadiana, con sabor, tradición y futuro.